ESPAÑOL (for english version just scroll down)En Marcos 10:17-22 tenemos el famoso relato del "joven rico" que al acercarse a Cristo lo saluda diciéndole "Maestro bueno...". Luego de formular su pregunta, el joven recibe una respuesta, digamos, extraña: "¿Por qué me llamas bueno?"
¿Quiere decir esto que Cristo creía que él mismo no era bueno? ¡Para nada! Ya que Cristo le dice después: "Sólo Dios es bueno", de lo que podemos entender que lo que le está diciendo es: "No me llamés bueno a menos que estés listo para aceptarme como tu Dios. Estás equivocado en tu concepto de mí".
La cuestión es esta: El joven rico veía a Cristo sólo como un maestro bueno, pero no como a Dios y Señor. Y esta "revelación" definió el resultado del encuentro entre Jesús y el joven porque, ya que Cristo "era" un maestro bueno (según el joven), todo lo que tenía para ofrecerle al joven era buenos consejos.
Y los consejos pueden tomarse o dejarse.
Y el joven lo dejó porque Cristo pidió demasiado.
Por el contrario, si el joven hubiera visto a Jesús como lo que en realidad era (Señor), habría entendido que a Cristo no le interesa negociar porque no es un accesorio en nuestra vida o una cita en nuestra agenda (1 vez a la semana). Más bien, Cristo es nuestra agenda... o debería serlo.
Entonces, si nosotros vemos a Cristo como un maestro bueno, también negociaremos con él en lugar de obedecerlo, y de hecho es lo que la mayoría de "cristianos" hace: negociar con Dios.
Podemos decir con toda certeza que lo que la Iglesia (en todo el mundo) necesita hoy es rendición absoluta a Dios.
Necesitamos dejar la negociación y comenzar a obedecer.
Necesitamos dejar de exigir nuestros derechos al Dios del universo y comenzar a servir.
Entonces, sí... Cristo no es "bueno" a menos que lo veamos como "Dios bueno" porque no le interesa ser un maestro bueno que da buenos consejos. Cristo es Señor y no aceptará ser nada menos.
ENGLISH
In Mark 10:17-22 we found the famous story of the "young ruler" who, when got near to Christ says 'hi' with these words: 'Good teacher...' After the question of the young ruler is asked, he gets an odd answer: 'Why do you call me good?', Jesus asked.
Does this means that Christ believed that he wasn't good? Not at all! Jesus continues saying: 'Only God is good', from what we can understand that Christ is saying: 'Don't call me good unless you're ready to accept me as your God. Your concept of me is wrong'.
The thing is this: The young ruler saw Christ only as a good teacher but not as a God and Lord. Ant this 'revelation' defined the result of the encounter between Jesus and the young ruler because, since Christ 'was' a good teacher, all he had to offer (according to the young ruler) was good advice and what do you do with and advice? You can take it o leave it.
And the young man didn't take it because Jesus asked too much.
On the contrary, if the young ruler would have see Jesus as he really is (Lord), he would have understand that Jesus is not interested in negotiating because he's not an accessory in our life or an appointment in our agenda (once a week). Jesus is our agenda... or should be.
Then, if we see Jesus as a good teacher, we will negotiate with him also instead obeying him. In fact, a lot of 'christians' do this: negotiate with God.
We can say with all certainty that what the Church (all over the world) need today is total surrender to God.
We need to stop negotiating and start obeying.
We need to stop demanding our 'rights' to the God of the universe and start to serve.
So... yes... Jesus is not 'good' unless we see him as 'good God' because he's not interested in being a good teacher with good advice. Christ is Lord and won't take nothing less.