miércoles, 16 de diciembre de 2009
"Gracias" en lugar de "por favor" • 'Thanks' instead of 'please'
jueves, 10 de diciembre de 2009
El reto de Navidad • Christmas' challenge
ESPAÑOL (for english version just scroll down)
lunes, 7 de diciembre de 2009
FEARLESS by Max Lucado
This is the theme of Max Lucado’s latest book. The life and all the fears that makes us live it the way we live it, or should I say: ‘The way we suffer it’? We have learned to fear and we can’t live without our daily super-extra-dose of angst.
But life wasn’t supposed to be that way.
This book was so helpful to me because I have lived pretty much with every fear on the list (in different times of my life). In top of that, my sister died a couple of months prior to my reading of ‘Fearless’ and that made the timing perfect.
I didn’t know how much the Lord touched the fear issue and the author unfolded that powerful truth in front of my eyes with such simplicity that made me think: My fear is ridicule!
Time after time the commandment is the same: Fear not! Fear not! Fear not!
But… Why? Why shouldn’t we fear?
First: because we were made for God’s glory, not fear’s. Second: God didn’t let us without direction: we know that life is hard, but that doesn’t mean that we should angst and lose our head about it. And third: Before a new baby is born, there will always be a little pain.
So let's be Fearless and jump like children into our Father's ship of rest!
viernes, 4 de diciembre de 2009
Soldados y Civiles • Soldiers and Civilians
martes, 1 de diciembre de 2009
UNA SOLA CARNE • ONE FLESH
ESPAÑOL (for english version just scroll down)
jueves, 26 de noviembre de 2009
Hollywood me afectó la realidad • Hollywood screw my reality
miércoles, 25 de noviembre de 2009
25 DE NOVIEMBRE 2MIL9
miércoles, 18 de noviembre de 2009
lunes, 16 de noviembre de 2009
LA MUSICA • THE MUSIC
martes, 10 de noviembre de 2009
LO SIMPLE DE DIOS • THE SIMPLE OF GOD
jueves, 5 de noviembre de 2009
MI ALMA TE CANTA
Letting Go of What People Think
ENGLISH (Taken from LIfeChurch.tv's blog)
Becoming obsessed with what people think about you is the fastest way to forget what God thinks about you.
My mom taught me the common truth, “You can’t please everyone.”
From my observation, ministers seem to be more vulnerable to people-pleasing than most professions.
In reality, we should be the most resolved of all not to live for the applause of men but the approval of God.
- Don’t let anyone talk you out of following God’s voice.
- Don’t let anyone’s criticism distract you from your passion.
- Don’t long for affirmation before you move forward.
Say what God prompts you to say. Go where God leads you to go. Do what God puts on your heart. Let go of living for people. Become obsessed with living for God.
martes, 3 de noviembre de 2009
EL PROBLEMA DE LA INTIMIDAD • THE PROBLEM WITH INTIMACY
viernes, 30 de octubre de 2009
KABUL 24 by Henry O. Arnold and Ben Pearson
This book is about an amazing true story of faith in the midst of uncertainty.
You will read about how the 24 workers of the Shelter Now International organization (both Christian and Muslims) were arrested illegally in Afghanistan just weeks before the 9/11 attacks, how their faith couldn’t be taken away nor imprisoned and how the message of the Gospel was heard from a prison turned into a pulpit.
This book left me one teaching: Any Christian can become a ‘tough times minister’ even if he didn’t wanted to. These 6 Shelter Now International foreign workers in Afghanistan answered a God’s calling to help the people that suffered the effects of a country in war. They weren’t looking for the martyrdom or the ‘Jesus super hero’ title, but God choose to put them into a situation where they were meant to be the last Christian fortress in a war land.
I didn’t found the usual super great faith declarations in the central people of the story (like I did in other books about people who gave their lives for Jesus). Instead, I’ve found a group of people who loved God and answered a call without knowing that, eventually, that obedience would take them into a situation that very few people could choose on their own. God often takes us to our destiny, by force, and once you’re there, you can be a huge witness for Jesus.
That’s the most inspiring message of the book: Any Christian can be a great Christian in awful circumstances if only the faith remains in Jesus. There might be pain, fear, uncertainty and solitude, but if you hold on to Jesus, there always be a way out.
Being the apostle Paul isn’t a ‘must’ in order to turn the prison into a pulpit. That’s the greatest lesson of this great book.
jueves, 29 de octubre de 2009
Los "tropiezos"
lunes, 26 de octubre de 2009
Hagámoslo al revés • Let's do it backwards
jueves, 22 de octubre de 2009
MI plan de negocios • MY business plan
viernes, 16 de octubre de 2009
Cuando buscás y buscás y buscás... pero no encontrás
¿Vieron la noticia? Un niño de unos 6 años construyó un globo aerostático, se subió en la canasta y se dejó llevar por el viento. Un tiempo después, el globo tuvo un desperfecto, alguien dio la voz de alarma y los noticieros y equipos de socorro se movilizaron. Siguieron al globo sin control por demasiados minutos, sin saber cómo rescatar al pequeño aspirante a astronauta, hasta que, por fin, la gravedad decidió ser parte del rescate. El globo cayó. Los rescatistas corrieron. Buscaron en la canasta. Nada. Buscaron en los alrededores. Nada. ¿Qué podía haber salido mal? Buscaron por todas partes. Nada. Parecía que el niño no había construido un globo sino una máquina teletransportadora. La gente comenzó a temer lo peor. Hubo un poco de pánico, supongo. Y entonces, un par de horas después, alguien finalmente dijo la verdad: El niño estaba en su casa. ¡Nunca se subió al globo!
Llámenme "sabio" o "nigromante" pero creo, y es una mera suposición, pero creo que la razón por la que los rescatistas no encontraron al travieso, fue porque no estaban buscándolo en el lugar correcto.
Y creo que esto es un gran ejemplo de nuestras vidas. Vivimos buscando. Buscamos alegría, satisfacción, paz, "justicia", realización, amor, balance. Pero no lo encontramos. De verdad. No lo encontramos, dejemos de mentirnos. ¿Por qué? Bueno, creo que ya lo saben: porque no buscamos en el lugar correcto.
Creemos que el dinero llenará el vacío. Y cuando eso falla, creemos que más dinero logrará lo que no logró el dinero anterior. Y cuando eso falla... bueno.
Creemos que una pareja va a llenar el vacío que sentimos. Y cuando eso falla cambiamos al plan b: otra pareja. Y luego pasamos al plan c. Y luego al d. Y luego al e de etcétera. Esto es un problema ¿o no? Y así gastamos todo el tiempo que tenemos en esta tierra, que en realidad no es mucho.
Ayer me dijeron que "un pesimista es un optimista con experiencia". Creo que esa frase es muy cierta y por eso puedo decir con todo el pesimismo del mundo que, si seguimos buscando "eso" que puede satisfacer nuestras almas en ese globo que flota sin control, al final, cuando el globo se estrelle irremediablemente, tendremos que aceptar que desperdiciamos los años buscando al niño en donde el niño no estaba.
Entonces... ¿qué hacemos? Yo diriá que empezar a buscar en el lugar correcto en lugar de andar cambiando de un plan a otro como rescatistas que nunca logran rescatar a nadie.
¿En dónde has estado buscando? Pensalo muy bien y atrevete a tomar una decisión. Entonces, si tomás la decisión correcta, tu vida de verdad va a cobrar sentido y todo lo que hagás (quizá incluso lo mismo que estás haciendo ahora)... tendrá otro sabor.
miércoles, 14 de octubre de 2009
Se dice "plantar"
Personalmente, no me gusta cuando alguien dice que "puso" o "abrió" una iglesia, porque esos términos, al menos aquí en Guatemala, es más bien comercial, es decir, tienen la connotación de iniciar un negocio. Ya sé que quizá haya alguien pensando: "Ajá, y es exactamente por eso que esos términos son los correctos." Y como no voy negar que hay personas que buscan su propia ganancia a través de las "poner una iglesia", tampoco voy a negar que hay muchísimos (y de verdad creo que son la mayoría) que sólo están siguiendo el llamado que Dios les hizo. Y estoy hablando por experiencia y no por puro prejuicio, como suelen hacerlo los "críticos".
A diferencia de los términos que menciono arriba, pienso que el término correcto para referirse al inicio de una iglesia es "plantar" porque no hace referencia a una actividad comercial sino a una extensión de la vida; un proceso que requiere paciencia, dedicación y muchísima fe.
Y aquí van algunas razones de por qué prefiero este término:
1 • Toda iglesia, por muy grande que sea, comenzó de forma pequeña, así como toda planta inició como una semilla.
2 • Para que la semilla dé fruto es necesario el sacrificio de la semilla, es decir, la semilla "muere" para dar vida. En la iglesia pasa lo mismo: al principio, cualquier plan que se emprenda, por muy pequeño que sea, supone grandes sacrificios para todos los involucrados.
3 • A veces, ciertas plantas simplemente no pueden echar raíces en ciertos tipos de tierra y en la iglesia sucede la misma historia: no todo tipo de persona podrá echar raíces en cualquier iglesia.
4 • En el "reino natural" no puede pasar mayor cosa sin la intervención del agua. Y bueno, en la iglesia tampoco pasa mayor cosa sin la presencia de Dios, su Espíritu y su Hijo.
5 • No importa cuántas veces se riegue artificialmente el césped del jardín, el agua de la manguera nunca tendrá el mismo efecto que el agua de lluvia. De la misma forma, si el cristiano sólo "bebe" del agua que sale de la boca del predicador pero nunca va él mismo a la fuente de agua viva a beber, sólo se mantendrá vivo, pero no alcanzará el máximo de su potencial.
6 • Los frutos no aparecen justo cuando la planta comienza a crecer, así que la planta debe seguir recibiendo cuidados. En la iglesia sucede exactamente lo mismo: el crecimiento espiritual es paulatino y los frutos puede no verse claramente en un principio.
6 • Si tenés flores en tu casa, por ejemplo, sabés que los colores, las texturas y las formas con que Dios las adorna son impresionantes. La iglesia es igual: hay todo tipo de iglesias, de todos los colores y de todos los tamaños, pero todas muestran el talento, la belleza y la creatividad de Dios.
7 • El sembrador siembra y riega, hace su trabajo, pero la transformación de semilla a planta lo hace Dios (no... no la "madre naturaleza"). Y en la iglesia, bueno, pasa lo mismo: nosotros podemos predicar, cantar, dirigir, apoyar, enseñar, aconsejar y compartir, pero el crecimiento es obra total de Dios. Él es la verdadera y única estrella de esta película.
Ahí están. Estas son algunas de la razones por las que creo que el término correcto al iniciar una iglesia es "plantar" y no "abrir" o "poner".
martes, 13 de octubre de 2009
¿Qué tiene de malo? • What's wrong with it?
lunes, 12 de octubre de 2009
NUESTRAS ARMAS • OUR WEAPONS
La Iglesia ha vivido a la defensiva por demasiado tiempo y, aunque muchos cristianos se están dando cuenta que son parte del equipo ganador (y si no lo creen sólo lean el libro de Apocalipsis), quizá no sepan qué armas tienen a su disposición.
miércoles, 7 de octubre de 2009
DDN • SOMOS EL FUTURO
Pregunta: ¿A quiénes nos referimos cuando hablamos del “futuro de Guatemala”?
Respuesta: A los niños.
Todavía recuerdo cuando Pepsi lanzó su campaña del “sabor de la nueva generación” en la que hacía referencia a la generación que venía, la generación del cambio, el futuro de la nación, la generation next.
En ese tiempo éramos nosotros el futuro del país pero ¿en qué momento dejamos de serlo? ¿En qué momento dejamos de ser la esperanza del cambio de la generación anterior y pasamos a ser la generación anterior para depositar en los niños de hoy la esperanza del cambio? Y es que pensar en los más pequeños como el futuro causa problemas serios en nuestra forma de vivir porque eso nos vuelve pasivos e indiferentes. De pronto, ya no tenemos sueños, ya no queremos intentar nada nuevo y ya no creemos que somos el futuro. Nos hacemos viejos en el corazón.
¿O no es cierto que cuando alguien todavía cree que puede cambiar el mundo, nos reímos por dentro pensando que “todavía está joven y hay que darle tiempo para que pierda todo ese idealismo”? Y sin embargo, al mismo tiempo que pensamos eso, tenemos el cinismo de decir que ellos son el futuro.
Y si ellos son el futuro, nosotros somos el pasado, no el presente, porque técnicamente no existe. Es decir, les dejamos la responsabilidad del cambio a ellos y nosotros tiramos la toalla, pero esta forma de vivir no funcionará nunca. ¿Sabés por qué lo aseguro? Bueno, pues porque en algún momento vos y yo éramos el futuro de este país y nuestros “padres” confiaron en que nosotros, de alguna forma, lograríamos un cambio. Y Guatemala está peor que antes. ¿Lo ves? Sacarnos a nosotros mismos del futuro no es la respuesta porque nosotros también…
Si te quiero regalar una televisión y te digo que podés escoger entre una nueva y una vieja, si sos normal y honesto, vas a escoger la nueva. ¿Por qué? Pues porque lo nuevo siempre es mejor. Hasta las escobas barren bien cuando son nuevas. Y si leemos rapidito el pasaje de Apocalipsis 21:1-5 veremos que ese deseo de las cosas nuevas, es un deseo dado por Dios.
Cristo hace nuevas todas las cosas, incluso a nosotros, los que ya no teníamos ganas de vivir, o que vivíamos con rencor, amargura, vicios que no nos llenaban pero nos entretenían mientras nos iban destruyendo, etc. Cristo puede hacernos nuevos a nosotros, los que ya nos rendimos y nos hicimos parte del pasado de este país. Los que ya no creemos que el mundo puede ser mejor.
¿Y cómo lo hace? Dándonos nuevos sueños, nuevos deseos de vivir, nuevos propósitos, nueva importancia. De pronto, nos damos cuenta de que todavía somos importantes, todavía valemos, todavía contamos para algo. Y eso nos pone del lado de la esperanza, del lado del futuro, del lado del “todavía podemos lograr un cambio”.
Esos nuevos aires nos hacen ser la nueva parte del futuro y nos saca del pasado. Y esto es lo que debemos aprender a hacer:
DEJAR EL PASADO ATRÁS
Todos, en algún momento o bajo alguna circunstancia, hemos dicho que el pasado era mejor. Que antes todo era mejor. Sí, vos también lo has pensado. Y en Eclesiastés 7:10 dice la Biblia que dejés de pensar así porque eso no es sabio. El pasado es el pasado, quedó atrás y no volverá, haya sido malo o haya sido bueno. Lo importante es dejarlo ahí a donde pertenece, pero sin nosotros. Lo importante es que nosotros no nos quedemos ahí guardados junto con todos los recuerdos. Justo como lo dice Pablo en Filipenses 3:12-14.
De la misma forma, Dios mismo dice en Isaías 43:18-19 que dejemos de vivir de los recuerdos de las grandes cosas que él ha hecho. Que sí debemos recordarlas, pero que ya no vivamos ahí, en el baúl del ayer, porque él siempre está haciendo cosas nuevas, cosas más grandes, cosas frescas. Él siempre está renovando todo lo que hace por nosotros.
¿Qué pasaría si mañana decido que voy a manejar mi carro hacia el trabajo, pero viendo siempre hacia mi casa? Tarde o temprano (y será más temprano que tarde) voy a chocar con otro vehículo, voy a atropellar a alguien o me voy a ir al fondo de un barranco. Y aunque el ejemplo parezca ridículo –y lo es–, es así como muchos de nosotros vivimos la vida: siempre viendo hacia atrás, mientras avanzamos hacia delante.
Si Dios es capaz de decirnos que ya no vivamos en los recuerdos de lo que él mismo ha hecho y vivamos en lo que sigue haciendo, es porque podemos manejar hacia delante y ver hacia delante. Eso es dejar el pasado en el pasado. Entender que si estamos vivos todavía tenemos esperanza. Si estamos vivos, todavía hay sueños. Si estamos vivos, todavía hay un propósito que cumplir. Si estamos vivos, todavía podemos seguir a Jesús y ser hechos nuevos.
Manejar el carro de la vida de forma correcta es dejar el pasado en el pasado mientras seguimos hacia el futuro. Porque nosotros, si estamos vivos, todavía somos el futuro. Todavía somos como niños que pueden cambiar el mundo. Todavía podemos soñar con una vida mejor. Y eso es lo mejor de todo, que Cristo dijo que debíamos ser como niños para entrar en el reino de los cielos, porque en ese reino sólo hay futuro y más futuro. En ese reino no se vive en el pasado, sino siempre en el futuro, siempre en lo que está más adelante, en la próxima meta, la próxima victoria.
Vos sos el futuro de Guatemala. Entendelo de una vez y celebrá el DDN como el niño que todavía sos. ¡Nosotros todos, sin importar la edad biológica, somos el futuro!
jueves, 1 de octubre de 2009
LO UNICO NECESARIO • THE ONE THING NECESSARY
miércoles, 30 de septiembre de 2009
NO DIGAS QUE NO PODES • DON'T SAY THAT YOU CAN'T
miércoles, 23 de septiembre de 2009
SEPTIEMBRE EN H3O / SEPTEMBER AT H3O
JUGAR A GANAR / PLAY TO WIN
ESPAÑOL
Según Mark Batterson hay dos formas de jugar un juego: La primera es jugar a perder, jugar a lo seguro, a defenderse, a evitar que el otro equipo gane defendiéndose hasta de lo que el equipo contrario no está haciendo. La segunda forma de jugar un juego, en cambio, es jugar a ganar, siempre atentos, buscando la oportunidad para sobrepasar al otro equipo, siempre arriesgándolo todo por la victoria, siempre hacia delante. De esto se trata el libro En un foso, con un león y en un día de nieve. Del riesgo que representa el destino.
A partir de la historia bíblica de Benaía (quien, en un día de nieve se interna en un foso y mata a un león con sus propias manos), el escritor desenvuelve página a página lo que significa cazar la gloria para la que fuimos creados y que está disfrazada como si fuera nuestra peor pesadilla mientras ruge furiosa para amedrentarnos y hacernos huir. Pero la verdad es que los cazadores de leones escogen el riesgo, hacen lo que los humanos normales no hacen: persiguen al león. Algo en ellos funciona de otra forma, quizá al revés, y donde cualquier persona en su sano juicio ve problemas, ellos ven oportunidades. Y lo más emocionante es que todos llevamos dentro a un cazador de leones.
Es hora de perseguir el destino en lugar de huir de él. Es hora de dejar de temer que nuestra vida se acabe y comenzar a temer que nunca empiece. Es hora de dejarse llevar por el entusiasmo que le dio origen a la palabra entusiasmo. Es hora de arriesgarse y desafiar las probabilidades. Es hora de dar el primer paso en dirección a esa oportunidad que bien podría explotarte en la cara. Es hora de jugar a ganar y dejar de jugar a no perder. Es hora de buscar el gol. Es hora de volver a palpitar con el corazón indomable que Dios nos dio cuando nos creó para cazar la gloria.
Y leer este libro sería un buen primer paso.
ENGLISH
According to Mark Batterson there are two ways to play a game: The first one is play not to loose, play it safe and don’t let the other team win just by defending every imaginable point, but the second way you can play a game is play to win, always alert, looking for the opportunity to outrun the other team, always risking it all in order to get victory, always stepping forward. That’s what this book, In a pit with a lion on a snowy day, is about. The risk of destiny.
From the center of the biblical story of Benaiah (whom, on a snowy day, gets into a pit and kills a lion with his hands), the writer unfolds page by page the meaning of hunting the glory that we were made for and that, too often, is disguised as our worst nightmare, roaring angry just to scare us and make us flee. But the truth is that lion chasers choose risk and make what a normal human wouldn’t: They chaise the lion. Something in them is wired differently, maybe backwards, and where any common sense person sees trouble, they see opportunity. And the exciting thing is that we all have a lion chaser inside of us.
It’s time to chaise our destiny instead of running from it. It’s time to not fear that our life shall come to an end, but rather fear that it shall never have a beginning. It’s time to let go with the enthusiasm that gave birth to the word enthusiasm. It’s time to risk it all and defy the odds. It’s time to take the first step towards that chance that could blow up in your face. It’s time to play to win and stop playing not to loose. It’s time to look for the score. It’s time to beat again with the untamed heart that God gave us when he made us to chase glory.
And read this book would be a great first step.
miércoles, 9 de septiembre de 2009
EL MILAGRO DE LA ADOPCION • THE MIRACLE OF ADOPTION
viernes, 4 de septiembre de 2009
THE NOTICER by Andy Andrews
Have you ever been in a situation in life that makes you wish to run and live on the top of a mountain for the rest of your days? Have you ever felt so lack of purpose that you really start to believe you were an accident? Have you ever been in need of someone explaining you why is it that life is so complicated? Well, all you need is a different perspective. A different point of view.